Hay algo que debe entenderse claramente y de una vez por todas; si existen las criticas en la prensa para todo aquel funcionario que ostente un poder y que son muy fácil de» borrarlas » argumentando que son chantajes.
La realidad son sus errores garrafales lo que permite a esa prensa crítica señalarles a todo funcionario deshonesto ante la opinión pública. .cuya fina sensibilidad también los señala a ellos con índice de fuego.
El periodismo bien entendido, es azote público de despotas: pero mal llevado con indignidad es cómplice,por guardar silencio,de los tiranos y de los corruptos.